5. Conclusiones


El llamado Fénix de los ingenios y Monstruo de la Naturaleza (por Miguel de Cervantes), es segundo,tras Cervantes, en la literatura española porque renovó las fórmulas del teatro español en un momento en que el teatro comienza a ser un fenómeno cultural de las masas. Sentó las bases del teatro clásico español del Barroco, sus obras siguen representándose y son de las mejores que se han escrito en español. Fue autor de tres mil sonetos, tres novelas, cuatro novelas cortas, nueve epopeyas, tres poemas didácticos, y varios centenares de comedias (1.800 según Juan Pérez de Montalbán. La vida y obra de Lope de Vega fueron de una exuberancia extrema. Fue amigo de Quevedo y enemigo de Alarcón, Cervantes y Góngora. En cuanto a la vida y producción literaria, fue ciertamente un fenómeno de productividad. Escribió en todos los géneros literarios: novelas, dramas y poesía, tanto lírica como dramática, a excepción de la novela picaresca. De corte tradicional, arte menor, y al estilo italianizante renacentista. A pesar de todo ello, se le conoce sobre todo por su copiosa producción dramática. Sus dramas, en comparación a los de sus coetáneos, resaltan por el ingrediente popular: temas y rimas tradicionales, populares y nacionales. No soló destacan por su calidad, sino también por haber supuesto una ruptura con el teatro clásico gracias a su Arte nuevo de hacer comedias. Las nuevas reglas teatrales de Lope de Vega supusieron el principio de una nueva etapa para el teatro español posterior. En cuanto a los géneros, divide la comedia en tres series: autos sacramentales, comedias de capa y espada y comedias de teatro, en que intervenían Santos, Papas, Emperadores o Reyes. No menciona siquiera la tragedia, aunque a veces la acción de alguno de sus dramas, se aproxima a este género. La razón es que para el español de su tiempo, el teatro era distracción y reposo de los problemas cotidianos. En “Lo fingido verdadero”, Lope insiste en que la comedia, aunque grave y seria en el fondo, debe ser esparcimiento y no angustia para el espectador. Sobre el desarrollo de la acción establece que sea en tres actos y en este orden: “En el acto primero ponga el caso; En el segundo enlace los sucesos; De suerte que hasta el medio del tercero Apenas juzgue nadie en lo que pare.” En otros pasajes señala que el estilo y lenguaje deben ser adecuados a la calidad de los personajes, y aún la forma, variada, de acuerdo con el estado de ánimo. En su teatro se introduce la visión española de la vida y del mundo, recogiendo la historia española en todos sus períodos. Fue defensor de la fe cristiana. Su santo favorito fue San Isidro, al que le escribió tres comedias. El Antiguo y el Nuevo testamento le inspiraron: “La creación del mundo”, “Daniel Perseguido” y “El Nacimiento de Cristo”. Es cierto que incurrió en muchos errores geográficos, pero esto puede explicarse en una persona que escribía tanto e ininterrumpidamente. Las obras y personajes de Lope de Vega son variadísimos: Santos, reyes y figuras populares. Pero todos valen por sí mismos y por algo más. Todos son representativos. Es extraordinario su equilibrio de la escena y profundo sentido psicológico en la movilización de las masas. Tal es el caso de Fuenteovejuna. Recordando que, como poeta, toda su producción teatral se desarrolla en forma poética, escribió sentidísimas elegías y delicadas églogas. Sus sonetos y sus romances, tienen una perfección antológica. Jugó con la métrica y con la rima. La única obra que escribió en prosa es su novela autobiográfica y dialogada: “La Dorotea”. En cuanto a su poesía lírica podrían distinguirse dos formas: la tradicional de arte menor y la italianizante. En cuanto a la primera cabe mencionar que Lope fue uno de los iniciadores del romancero nuevo. En sus romances nos canta, además de otros temas, sus múltiples aventuras amorosas. También escribió, en esta misma vena tradicional y popular, numerosas glosas, romances, canciones, tercetos, idilios y villanescas La segunda forma poética la componen sus "Rimas humanas", que contienen 200 sonetos, en su mayor parte mitológicos y pastoriles, y "Rimas sacras", que incluyen 100 sonetos, principalmente religiosos y hagiográficos. Tanto en una como en la otra forma, observamos claramente el ingrediente temático de su azarosa vida, bien mundanal como religiosa. Fue Lope también uno de los grandes poetas líricos de la lengua castellana, expresando sus sentimientos magistralmente en sus poesías.

Fragmento de Fuenteovejuna

COMENDADOR: ¿Sabe el Maestre que estoy en la villa?
FLORES: Ya lo sabe.
ORTUÑO: Está, con la edad, más grave.
COMENDADOR: ¿Y sabe también que yo soy Fernán Gómez de Guzmán?.
FLORES: Es muchacho, no te asombre.
COMENDADOR: Cuando no sepa mi nombre, ¿no le sobra el que me dan de Comendador Mayor?
ORTUÑO: No falta quien le aconseje que de ser cortés se aleje.
COMENDADOR: Conquistará poco amor. Es llave la cortesía para abrir la voluntad, y para la enemistad, la necia descortesía.
ORTUÑO: Si supiese un descortés cómo le aborrecen todos y querrían de mil modos poner la boca a sus pies, antes que serlo ninguno, se dejaría morir.
FLORES: ¡Qué cansado es sufrir!, ¡qué áspero y qué importuno!. Llaman la descortesía necedad en los iguales, porque es entre desiguales linaje de tiranía. Aquí no te toca nada, que un muchacho aún no ha llegado a saber que es ser amado.
COMENDADOR: La obligación de la espada, que le ciñó el mismo día que la cruz de Calatrava le cubrió el pecho, bastaba para aprender cortesía.
FLORES: Si te han puesto mal con él, presto le conocerás.
ORTUÑO: Vuélvete, sin en duda estás.
COMENDADOR: Quiero ver lo que hay en él.....